Lugar tradicional que le urge una remodelada. Buena cocina, buenos espectáculos. Cumple pero está cerca de perder el glamour y hacerse viejo. Para citas románticas casuales y grupos.
Parada nocturna obligada en la condesa. Rápido y eficiente. Para noctámbulos y antes del after. Muy tradicionales.
Excelente relación costo-tiempo-calidad. Sin glamour ni costos innecesarios hacia el cliente. Rápido y muy bien ubicado. Aunque esté lleno la espera no es mucha.
Buen auto lavado, un poco tardado pero muy buen servicio. Pequeño. Para ir en horas no pico. Precios adecuados.
Buenas paletas a un precio justo. Amplia variedad, algunos sabores mejor logrados que otros pero en general todos cumplen. Para el postre godin. Nada realmente espectacular pero tampoco decepciona.
Como todos los starbucks. Siempre lleno. Para hacer una pausa antes de entrar a reunión. Demasiado expuesto y lleno para "trabajar" o estudiar por un periodo demasiado largo.
Más o menos buena, no bonita (tampoco fea), y sí barata. En la tierra de los ciegos... la mejor opción económica en los alrededores del WTC. Para comida godin a precio accesible en el rumbo.
Excelente opción para degustar la típica BBQ estadounidense. Excelente calidad de la comida. Buen servicio mientras no sea hora pico. Llegar temprano. Para grupos pequeños y encuentros informales.
Lugar atrapado en el pasado. Esta fuente de sodas sobrevive del cariño de la gente que la frecuenta desde niños. La calidad no es mala, pero dista de ser algo memorable. Para las tardes de nostalgia.
Muy Buen lugar, servicio atento y comida de calidad a precios justos. Lugar pequeño, llegar temprano. Para comida Godin fresa o antojo de una muy buena hamburguesa. Parejas y grupos chicos. No barato
Si ya has ido a unos bisquets Obregón, ya los conoces todos. Aplica para este lugar. Decente. No hay más que decir.
Agradable con un ambiente relajado y servicio cordial aunque un poco ineficiente. Para una comida o cena relajadas y sin prisa. Platillos adecuados sin ser espectaculares. Cumple para algo casual
Muy buena carne. Ideal para llevar. Te la pueden hacer ahí. El lugar no es muy cómodo. Aunque la carne es buena, hay que escogerla, la calidad es dispareja de acuerdo al corte.
Lugar casual con ambiente relajado. Ideal para tomar una cerveza y platicar. Buenos platillos. Excelente para citas casuales y grupos pequeños. Precios razonables.
Además de tacos clásicos como pastor, bistec y chuleta, cuentan con combinaciones bien logradas. No baratos pero tienen gran calidad y un precio justo. Para citas casuales y grupos pequeños.
Excelente conservación del palacio. Lleno de historia. Vale la pena la visita. Demasiado concurrido. Llevar paciencia.
Impresionantes jardines. Llenos de historia y propicios para la reflexión. No importa cuánta gente haya o la demanda, siempre hay espacio en los jardines.
Lugar acogedor y agradable. Buen servicio y muy buena cocina. Hay opciones veganas. Si se anda por El Barrio se puede cenar y precopear aquí.
Una bella catedral y un vista muy linda de París. Muy concurrida pero fluida. Para dedicarle una hora a la visita.
Café en todas sus extracciones excelente degustación. Aunque parezca extraño, pocos lugares para degustar café. Recomendable y poco asediado por los turistas.
Llena de historia. Esta catedral barroca es una visita obligada. La entrada es gratuita y si se desea acceder al tesoro reguardado ahí, la entrada cuesta módicos 5 euros.
Un monumento lleno de cultura e historia. Una de las paradas obligadas. Como todos los monumentos y lugares turísticos, llegar temprano y traer harta paciencia.
Buena calidad, buen sabor. No extraordinarios pero si muy buenos. Cumplidores. Falta un poco de profesionalismo en la atención y escasean los sabores populares. Si corrigen eso tendrán mayor éxito.
Excelente lugar para rehabilitarse y aprender. Cuentas paquetes y promociones para corredores. Si eres corredor, muy recomendable.
Un espacio para el teatro independiente y no ten comercial. Vale la pena conocerlo.
La oferta es más limitada por el tamaño de la sucursal. Variedad del producto de acuerdo a la gente que lo visita.
